El carbonato de magnesio nos ayuda en los momentos en que no conseguimos regularidad para ir la baño, sufrimos de estreñimiento y malestares intestinales.
El magnesio es uno de los minerales más abundantes de nuestro cuerpo y que actúa en muchísimas reacciones dentro de él. Podemos tomarlos en diferentes formulaciones, dependiendo de cuál se nuestra necesidad.
En su fórmula de carbonato, se convierte en un aliado para nuestro sistema digestivo. Es un excelente laxante que, además, reduce sensiblemente los problemas de acidez y de retención de líquidos. Por si fuera poco, y gracias a su efecto positivo en el tránsito intestinal, también ayuda para combatir la acumulación de gases.
Modo de empleo:
Adultos, disolver 2 cucharadas en medio vaso de agua o zumo y tomar después de hacer la digestión y antes de acostarse. El sabor neutro, inocuo y hasta insípido, de modo que es bastante habitual mezclarlo en cualquier bebida o alimentos.
Ingredientes:
Carbonato de magnesio en polvo.
Apto para celiacos.
Apto para veganos.
Advertencias
La dosis diaria recomendada no debe ser superada.
Los complementos alimenticios no son un sustituto de una dieta variada y equilibrada.
Manténgase fuera del alcance de los niños.