El diente de león destaca sobre todo por ser un excelente protector hepático así como por su poder diurético.
- Acción colerética (activa la producción de bilis en la vesícula biliar) y colagoga (activa la expulsión de bilis retenida en la vesícula biliar hacia el intestino). Es un depurador-limpiador de la función hepatobiliar, estimulando tanto al hígado (para que produzca más cantidad de bilis) como a la vesícula biliar (para que excrete la bilis almacenada al intestino) y así facilitar digestiones pesadas y evitar dispepsias y problemas digestivos.
- Disminuye la retención de líquidos: gracias a su naturaleza diurética, favorece la micción y ayuda a eliminar el exceso de agua de nuestro organismo. Además, nuestra orina contiene un porcentaje de un 4% de materia grasa, por lo que cuanto más orinemos, más agua y grasa se perderá, así que también favorece la pérdida de peso.
- Contiene muchísimo calcio, mucha luteolina y vitamina C, dos de los antioxidantes más potentes presentes en la naturaleza. Éstos aminoran el deterioro óseo producto del paso del tiempo y de los radicales libres.
- Potente desintoxicante, por lo que es muy útil en el tratamiento de acné por razones hormonales, se encarga de regular las hormonas, favoreciendo la expulsión de toxinas y evitando infecciones.
Contraindicación: piedras en riñón o vesícula, acidez estomacal, embarazo, lactancia o niños pequeños.
Composición por 3 ml:
Humectante: glicerina, agua, extracto liofilizado de diente de león (Taraxacum officinale Weber, raíz) (480 mg), gamma-ciclodextrinas (160 mg) y alfa-ciclodextrinas (80 mg).
Modo de empleo:
Adultos: Tomar 1 ml 3 veces al día diluido en agua.
Apto para celiacos.
Apto para veganos.
Advertencias
La dosis diaria recomendada no debe ser superada.
Los complementos alimenticios no son un sustituto de una dieta variada y equilibrada.
Manténgase fuera del alcance de los niños.